lunes, 18 de febrero de 2008

Giros sagrados

Siguiendo con el tema giro (Central Park y ruedas de oración) , hablo hoy de giros sagrados. Todas las religiones han rodeado sus lugares sagrados como muestra de respeto o petición de deseos.

En Egipto, en Luxor, en el templo de Karnak hay un gran escarabajo de granito construido por Amenofis III. Dar vueltas alrededor de él (entre 5 ó 7) hace que se conceda el deseo pedido. Simboliza la vida y el poder. Está situado junto a un lago en el que el faraón se bañaba para purificarse.

En España, en Navarra, situada en las afueras de Muruzaba se encuentra Santa María de Eunate (etimológicamente derivado del euskera, Eunate significa cien puertas). Iglesia románica octogonal (la planta octogonal se relaciona con la Orden del Temple) del siglo XII, su característica principal es que su claustro se encuentra en el exterior de la propia iglesia. La tradición señala que hay que dar tres vueltas descalzos por el claustro exterior y después de entrar en la iglesia situarse en el centro de la bóveda para cargarse con energía telúrica y conseguir el deseo anhelado.

En el Tibet (China), en la ciudad de Lhasa se encuentra el Palacio de Potala. El Potala era la residencia oficial del Dalai Lama hasta la invasión china, desde entonces el Dalai Lama reside en la India (Dharamsala). Los peregrinos tienen la posibilidad de completar tres vueltas al palacio, en tres diferentes círculos concéntricos: Nangkor (el más interior), Barkor (el intermedio, que pasa por el mercado tradicional del mismo nombre) y Lingkor (el más exterior) (Más información). La peregrinación por estos caminos se hace midiendo el suelo con el cuerpo, es decir, el peregrino da tres pasos y se tumba en el suelo postrándose, se levanta, da tres pasos y vuelve a tumbarse, colocando sus pies dónde antes estaba su cabeza. Visten delantales de cuero y usas maderas en las manos para evitar las heridas.

Los derviches, concretamente los mevleví, alcanzan en las sema el éxtasis. La danza, girar sobre sí mismos con los brazos extendidos, simboliza "la ascendencia espiritual hacía la verdad, acompañados por el amor y liberados totalmente del ego".

En Italia, en se encuentra en Santuario de Nuestra Señora de Loreto. Según una tradición del siglo XIII la Santa Casa (la casa donde nació la virgen María, recibió el anuncio del Arcángel San Gabriel y vivió con San José) fue trasladada por los ángeles a Tarseto (Dalmacia) para ser protegida de los Mamelucos que habían invadido Palestina. Los ángeles eran en realidad la familia Ángeles. Posteriormente cruzó el mediterráneo hasta Italia, siendo depositada en un bosque de laureles (Lauretum, del latín). La construcción del santuario alrededor de la casa se llevó a cabo en el siglo XIV. La santa casa se encuentra rodeada por un escalón de mármol sobre el que los devotos se arrodillan y completan un giro completo a la casa en esa postura. El escalón tiene un surco provocado por el desgaste del roce de las rodillas al girar.

14 comentarios:

  1. Mi madre estuvo el año pasado en el Santuario de Loreto. No sabía que era una casa de Palestina, donde segun la tradición se produjo la anunciación que se había trasladado a Italia.
    Vi una vez en la tele lo de los tibetanos que daban 3 pasos y se arrodillaban, pero no sabía lo de los tres circulos concentricos.
    Ahora que lo pienso, en mi pueblo las procesiones consisten en dar una vuelta por las calles centricas que hay junto a la iglesia. Fijate, un giro mas.

    ResponderEliminar
  2. Lo que se aprende con tus entradas !!!!
    Ahora,qué me ha entrado un dolor de rodillas con lo del santuario del Loreto!!

    Qué tengas un buen día.

    ResponderEliminar
  3. En realidad, el tema giro siempre ha estado asociado al culto y a la veneración. También están los ejemplos de
    * La Meca
    * Los indios americanos bailando alrededor de sus hogueras o sus totems
    * ...
    * La procesión del pueblo de Masmi y de muchos otros pueblos

    Y muchos otros bailes, aunque creo que en este caso no es por el mismo motivo (sardana, chotis, jotas,...)

    Lo de los tibetanos deja el camino de Santiago un poco como camino para señoritas. El rito de los tres pasos y tumbarse lo mantienen durante toda la peregrinación y no sólo al recorrer los círculos concéntricos alrededor del Potala. Rezar no es complicado (con sus ruedas de oración), pero se lo toman muy en serio.

    Cuidado con esas rodillas, que hay que mantenerlas bien para Loreto :-)

    ResponderEliminar