
Estoy de acuerdo en que en Girona casi no se usa el castellano y, bueno, me puede parecer o no mal, pero lo acepto porque es su lengua y está bien que la usen y estén orgullosos de ella. Eso sí, los funcionarios, aunque sean de la Generalitat y no del Estado, deberían tener conocimiento de castellano, que se mire como se mire, es el idioma oficial del país. Comprendo que alguien que no esté trabajando cara al público (o que, estándolo no tenga que escribir nada: dependientes, hosteleros, etc.) tengan dificultades para escribir en castellano por la falta de costumbre, pero con todo y con eso, unos conocimientos sólidos del idioma deberían evitar semejantes errores.
Da un poco de vergüenza ajena pensar en qué imagen se pueden llevar los turistas de una ciudad preciosa como Girona. Es posible que su inglés fuera perfecto y que si nos hubiera escrito la declaración en ese idioma no hubiera habido ni una falta de ortografía, pero... si el castellano que es la oficial la dominan así. Además, la hoja con los derechos del denunciante nos la dieron escrita directamente en catalán.
No quiero centrarme exclusivamente en la denuncia, durante el resto del viaje también tuvimos alguna que otra dificultad para hacernos entender, no por la falta de buena voluntad de la gente, sino porque, al decirles que no entendíamos catalán les costaba hablar en castellano. Hay que abrir un poco los horizontes para conseguir más turismo y con el aeropuerto manejado casi en exclusiva por Ryanair hay que aprender a tratar con los posibles visitantes.
Poco más que añadir.
Por cierto, ayer fue el Día escolar de la NO-Violencia y la Paz, muy apropiado.