Tipos de pisada

El cuerpo humano se apoya sobre dos pies (lo que nos convierte en bípedos). Estos pies se articulan mediante el tobillo, una articulación (en la que se encuentra el astrágalo) que permite un amplio rango de movimientos y que con cada pisada tiende a amortiguar el impacto.

Dependiendo del giro que realicen los tobillos se distinguen tres tipos de pisadas:

• Pronadora
• Supinadora
• Neutra

Pronador
Los tobillos tienden a girarse hacia el interior. Es la más común de las pisadas, pero debe ser corregida cuando se realiza una actividad que implique pasar mucho tiempo de pie o repetidos impactos, como correr. La pronación implica un exceso de empuje hacia el interior del pie en el momento del apoyo.
Provoca torceduras en el pie, la espinilla, incluso la rodilla. Las personas con las rodillas juntas o con los pies planos tienen tendencia a este tipo de pisada

Supinador
Los tobillos tienden a girarse hacia el exterior. El apoyo del pie se realiza sobre el boder externo.
Provoca fascitis plantar, tendinitis en el Tendón de Aquiles y otros problemas. Las personas con alto arco en los pies o tendones de Aquiles tensos tienen tendencia a este tipo de pisada.

Neutra
Los tobillos no se giran, manteniéndose en la vertical con el talón.

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